El Internet de las cosas o IoT (Internet of Things), se refiere a la interconexión digital de objetos cotidianos con Internet. El término fue propuesto por Kevin Ashton, director del Auto-ID Center, en 1999. Esta tecnología ha sido denominada como la siguiente revolución industrial, y se espera que cambie la manera en que los negocios, gobiernos y consumidores interactúan con el mundo físico.
Aunque esta tecnología será una de las que cambiaran la vida de los habitantes en las grandes ciudades, en el país existe poco desarrollo. Según un estudio de la OCDE, México tiene una penetración de sólo el 6% de objetos conectados y se ubica en el lugar número 18 de una lista de 24 países, en materia de desarrollo del Internet de las Cosas. En el presente artículo se presenta un pequeño resumen del estado actual del IoT en el país, utilizando los siguientes parámetros: infraestructura, inversión e investigación y desarrollo.
1. INFRAESTRUCTURA
Una infraestructura adecuada es fundamental para el desarrollo de IoT. Dicha infraestructura consiste en el almacenamiento de los datos, en sistemas de administración de energía, en hardware de baja potencia y en sistemas de seguridad. Mientras que en México parte de esta, será proporcionada por compañías extranjeras, en el aspecto de telecomunicaciones, será necesario la difusión de las redes de internet de banda ancha y la implementación del protocolo IPv6.
Una característica de la tecnología IoT es que requiere que los dispositivos estén conectados a una red de Internet, en ese aspecto, la principal infraestructura es el Internet de banda ancha. Pese a esto, una estimación de INEGI en 2013 dice que solamente el 30% de los hogares del país cuentan con una conexión a Internet. A esto se le conoce como “brecha digital”, y debe ser reducido para la correcta proliferación de las tecnologías de IoT.
2. INVERSIÓN
Las empresas y el gobierno han invertido en el desarrollo de soluciones y aplicaciones que utilizan IoT. Dentro de los sectores en los que más se ha apostado se encuentran el industrial, el gubernamental y el de consumo. Por ejemplo, la inversión industrial significo 1358 millones de dólares en 2015. El sector gubernamental concentró 13% restante de la inversión distribuida principalmente en proyectos de SmartCities o ciudades inteligentes, con 154 millones de dólares como inversión. Elementos como SmartGrid, el control del patrimonio gubernamental y el transporte público completan la lista de categorías en las que se registró inversión gubernamental.
Es importante destacar que, de acuerdo con Deloite México, en 2020 nuestro país tendrá 200 millones de dispositivos conectados a la red, lo que lo posicionará en el Top 5 de países latinoamericanos con mayor adopción de IoT. Al cierre de 2017 el valor del mercado IoT en México tuvo un crecimiento de 26% y llegó a los 4 mil 158 millones de dólares.
3. INVESTIGACIÓN Y DESARROLLO
En México existen pocas instituciones que realicen investigaciones en el tema específico de IoT, las principales son INFOTEC y CINESTAV; cuyas líneas de investigación se enfocan en aplicaciones para ciudades inteligentes y manejo de datos. No obstante, el Gobierno Federal con apoyo de ProMéxico, el Banco Mundial, CANIETI, entre otros, han enfocado esfuerzos para fomentar el desarrollo y aplicación de IoT en los distintos sectores económicos y sociales del país.
Entre estos esfuerzos, se puede citar la construcción de “El Centro de Innovación, Desarrollo Tecnológico y Aplicaciones de Internet de la Cosas (CIIOT)”, el cual se instalará en Jalisco. El CIIOT será el primero a nivel nacional y estará listo para 2021. De principio, se centrará en áreas especificadas dentro de la Agenda Estatal de Innovación, como los sectores agroalimentarios, salud y farmacéutico, tecnologías de la información, biotecnología e industrias creativas, entre otras.
Entre los proyectos e iniciativas más interesantes dentro del país, se encuentran las ciudades inteligentes, los cuales utilizan de manera intensiva las tecnologías de IoT para reducir el impacto ambiental y aumentar la calidad de vida de los ciudadanos. En México existen cuatro ciudades inteligentes en proceso: Maderas en Querétaro, Ciudad Creativa y Tequila en Jalisco y Smart Puebla.
